Por Camila Obreque, Encargada de Comunicaciones CFTOH.
La educación técnica profesional (ETP) en Chile se ha consolidado como un pilar fundamental para el desarrollo económico y social del país. Este tipo de formación, que combina el aprendizaje teórico con la práctica en el campo laboral, prepara a los estudiantes para enfrentar los desafíos del mundo del trabajo, proporcionando las competencias técnicas que demandan los diversos sectores productivos.
¿Qué es la Educación Técnica Profesional?
La ETP se caracteriza por ofrecer carreras orientadas a la formación en oficios y profesiones técnicas que son clave para el desarrollo de la industria, la tecnología, el comercio y los servicios. Los estudiantes pueden optar por continuar su formación en liceos técnico-profesionales a nivel secundario, y luego avanzar hacia la educación superior en institutos profesionales (IP) y centros de formación técnica (CFT).
La Relevancia de la ETP en Chile
En un país como Chile, donde la economía depende en gran medida de sectores como la minería, la agroindustria, la manufactura y los servicios, la educación técnica profesional juega un rol crucial en la formación de capital humano calificado. Los técnicos son esenciales para el funcionamiento de las empresas y organizaciones en diversas áreas, desde la construcción y la electricidad hasta la administración y la salud. Además, la ETP contribuye a la movilidad social, ofreciendo a miles de jóvenes la oportunidad de acceder a una educación que los conecta directamente con el mercado laboral, aumentando sus posibilidades de empleabilidad y mejorando sus condiciones de vida.
El Rol de los CFT en la Formación Técnica
Los centros de formación técnica (CFT) se cataloga como una institución clave en el ecosistema de la ETP en Chile. Estas entidades están diseñadas para ofrecer programas de corta duración, con un enfoque práctico que permite a los estudiantes ingresar al mercado laboral rápidamente. En particular, los CFT Estatales, como el CFT Estatal de O’Higgins, son parte de una estrategia nacional para garantizar que la formación técnica sea accesible a todos, independientemente de su ubicación geográfica o situación económica.
Aunque la educación técnica profesional en Chile ha avanzado significativamente, aún enfrenta desafíos importantes. Entre ellos, se encuentran la necesidad de mejorar la articulación entre la ETP secundaria y la superior, fortalecer la calidad de la enseñanza, y asegurar una mayor vinculación con las necesidades de los sectores productivos en constante evolución.
A pesar de estos desafíos, la ETP en Chile sigue siendo una herramienta poderosa para el desarrollo del país. Con un enfoque en la innovación, la sostenibilidad y la formación continua, la educación técnica profesional se perfila como un actor clave en la construcción de un futuro más equitativo y próspero para todos.
